En un país donde la mitad de la población vive en la pobreza, gran parte de los habitantes de la ciudad, de 18.4 millones de habitantes en su zona metropolitana, no tienen la posibilidad de disfrutar de las maravillosas playas mexicanas del Caribe o del Pacífico.
Para disfrutar de una playa natural, un habitante de Mexico DF debe recorrer aproximadamente 350 kilómetros hacia el Pacífico para llegar a Acapulco o unos 400 hacia Veracruz, sobre el Golfo de México. Y para llegar a destinos más lejanos y costosos, como por ejemplo Cancún o Los Cabos, es necesario ir en avión o conducir durante más de 15 horas.
El lugar cuenta con canchas de fútbol y voleibol, puestos de comida y bebidas, pero no se permite el consumo de alcohol. También hay estrados para grupos musicales y aspersores para mitigar el calor de la primavera, en la que se espera se superen los 30 grados centígrados. Las playas serán de entrada gratuita y estarán abiertas hasta que finalice el verano, en agosto.
La arena fue traída de minas del estado de Veracruz, pero su color varía en las distintas zonas de la playa artificial, de manera que una parte es oscura como en el Golfo de México y otra blanca como la Cancún.
Para dar cabida a una enorme demanda, se abrirán otras tres playas mas en Ciudad de México.
Vía | BBC World