Comentábamos hace un par de semanas que la ciudad de Málaga era uno de los 53 destinos recomendados por el New York Times para el 2008. Y no lo es sólo para los extranjeros sino también para los propios españoles, en especial para los madrileños ahora que disponen ya del AVE Madrid-Málaga.
Y no es para menos, ya que ahora los madrileños tendrán la playa a tan sólo 2 horas y media en tren. Un aspectoe éste que no se le escapa a casi nadie. Ni siquiera (o sobre todo más bien) a las autoridades locales, que han sabido aprovechar la oportunidad del estreno de la línea ferroviaria de alta velocidad para y vender la ciudad como "el nuevo centro de Madrid" y potenciar también la imagen de la Costa del Sol como playa de los madrileños.
Lo que no acabo de entender es el por qué desde los medios de comunicación se insiste en venderlo como el AVE de Málaga a Madrid en clave turística, si lo realmente importante desde un punto de vista turístico se halla precisamente en sentido inverso: Madrid-Málaga.
Vía | Voy de Viaje