El Flying Scotsman ('escocés volador') hizo historia en el mundo de los trenes cuando su velocímetro alcanzó las 100 millas por hora.
Era la primera locomotora en alcanzar las 100 millas por hora (160 km/h), y por eso, y por otras razones, fue catalogada como 'el tren más famoso del mundo'.
Flying Scotsman
La industria ferroviaria británica en las décadas de 1920 y 1930 competía con nuevas carreteras para los pasajeros, lo que significa que mantener una reputación de velocidad y eficiencia era extremadamente importante.
Todo comenzó en 1934 para el LNER Class A3 4472 Flying Scotsman. Se convirtió en la primera locomotora de vapor que registró oficialmente los 100 mph, durante el viaje de 393 millas por Londres y Edimburgo.
El tren recorrió la ruta 'Flying Scotsman' de 1928 a 1963, lo que llevó a que la locomotora a menudo se llamara con el nombre de su ruta.
En su tiempo en servicio regular, el tren viajó dos millones de millas. Pero la jubilación fue solo el comienzo de las aventuras del escocés.
El tren viajó por todo el mundo, realizó visitas a diferentes países e incluso rompió otro récord en 1989, este para el recorrido de vapor sin escalas más largo: 422 millas (679 km), el 8 de agosto de 1989 en Australia.
Flying Scotsman recorrió más de 45.000 km sobre vías australianas, concluyendo con un recorrido transcontinental de regreso de Sídney a Perth a través de Alice Springs, en el que se convirtió en la primera locomotora de vapor en viajar por el recientemente construido Ferrocarril de Australia Central, de ancho estándar.
El Museo Nacional de Ferrocarriles lo compró en 2004 y estuvo allí entre 2006 y principios de 2016. En enero, el motor renovado se movió con su propia energía por primera vez. Restaurar la parte de la historia ferroviaria británica costó 4,5 millones de libras.
El Escocés es un tren encantador para muchos, aunque el sistema de 'tren bala' de alta velocidad Shinkansen de Japón dejó su récord de velocidad en ridículo después de su inauguración en 1964, con una línea de la nueva red alcanzando las 130 mph.
A principios de noviembre, esa línea de tren rompió su propio récord de 366 millas por hora con un nuevo récord de 374 millas por hora. Japón debe sus nuevos récords a los diseños de 'levitación magnética' de los nuevos trenes que utilizan potentes electroimanes para hacer levitar el tren en lugar de ruedas.
Pero con su restauración, todos pueden ver algunos de los inicios de alta velocidad de la historia del tren con el Escocés. En una encuesta realizada en 2015 entre personas de los cuatro continentes, volvió a ser la locomotora más conocida.
Una de sus primeras apariciones en el cine fue en la película de 1929 The Flying Scotsman, que incluía una secuencia completa a bordo de la locomotora.