Cuando paseo por una ciudad nueva y me topo con un lugar que no aparecía en los planes de visita pero que parece interesante, difícilmente me quedo en la puerta, y más si la entrada es gratuita. Así se descubren sorpresas tan agradables e interesantes como el Museo Nicanor Piñole en Gijón, un espacio monográfico consagrado al pintor gijonés Nicanor Piñole.
Reconozco que la obra de este autor me era desconocida, pero un día antes había podido ver algunas pinturas de él que me impresionaron, unos retratos que atrapan al espectador con sus gestos profundos, en el Museo Casa Natal de Jovellanos. Así que adentrarme en su obra, en sus fascinantes retratos y paisajes, mereció la pena.
El objetivo principal del Museo Nicanor Piñole es dar a conocer la trayectoria artística del autor, haciendo especial referencia a su significado en el contexto de la plástica asturiana y nacional. La exposición, que sigue criterios cronológicos y temáticos, incluye los dibujos y algunas de las pinturas más representativas de las diferentes etapas.
Su extensa obra pictórica aborda diversidad de géneros y técnicas: retratos, paisajes, naturalezas muertas y escenas populares de carácter asturiano realizados al óleo, la acuarela, el pastel… Como he comentado anteriormente, me impactaron los retratos, especialmente los dedicados a las personas mayores, con una profundidad en la mirada y el gesto que te atrapa.
Las escenas típicas asturianas también son geniales para detenerse en los detalles y aprender acerca de esta tierra, sus fiestas y sus tradiciones.
Por otra parte, el museo cuenta con una serie de objetos personales vinculados a Nicanor Piñole y su actividad artística, anteriores y posteriores a la Guerra Civil: esculturas, la paleta y la caja de pinceles, catálogos de sus exposiciones, fotografías, muebles…
Podemos realizar la visita al museo siguiendo sus nueve salas y las galerías a lo largo de sus tres plantas. Existen servicios complementarios de pago como audioguías, itinerarios culturales y visitas guiadas, aunque para una primera aproximación a su obra y dejarnos cautivar por las pinturas basta un recorrido individual.
La Fundación Museo Nicanor Piñole, que se inauguró en 1991, se ubica en el antiguo Asilo Pola (proyectado entre 1903 y 1905), una bonita casa rodeada de jardín, en las proximidades de la Puerta de la Villa, en la actual plaza de Europa, donde estuvo emplazada la Puerta o Arco del Infante, erigido por otro personaje insigne de la ciudad, Jovellanos.
Ocupa el extremo de una manzana limitada por la Plaza de Europa, Avenida de la Constitución y Carretera de la Costa, manzana que tiene su origen en el derribo de las fortificaciones que existían en Gijón hacia 1870.
La interesante colección procede de la aportación de Enriqueta Ceñal Costales, viuda del pintor, así como de las obras donadas por el autor al Museo Casa Natal de Jovellanos, otra de las visitas imprescindibles en Gijón, como os contaremos más adelante.
El Museo Nicanor Piñole en Gijón abre de martes a viernes de 9’30 a 14 y de 17 a 19’30 horas; sábados, domingos y festivos de 10 a 14 y por la tarde el mismo horario que entre semana. La entrada al museo es gratuita, una razón más para acercarse a él.
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