Es decir, que Reel es un neoyorquino que ahora escribe en cafeterías españolas. Por si fuera poco, escribe sobre España en general, y Sevilla en particular, de modo que escribe sobre cosas que yo también escribo. Pero desde el punto de vista de alguien que ha vivido casi siempre al otro lado del charco. Suena rocambolesco, pero yo no lo veo así. ¿Acaso yo no escribo también desde Nueva York o Londres?
De hecho, encuentro una gran ventaja a la hora de leer un libro de viajes escrito por un neoyorquino que vive en Sevilla. La forma de mirar. Lo que realmente diferencia un lugar de otro, un viaje de otro, no consiste tanto en lo que encontramos, sino en cómo los registramos e interpretamos.
Es decir, que no importa que conozcáis Sevilla, o España. No importa que seáis españoles o sevillanos. Después de leer ¿Qué pinto yo aquí? os sentiréis como si viajareis a algún país exótico de nombre impronunciable.
Con Reel no solo se puede redescubrir o incluso descubrir lo que por pereza no habíamos visto, sino encontrarle otra gracia, otra interpretación que acaso nos permita entendernos mejor a nosotros mismos. Y también, por qué no, visitar de nuevo Sevilla con otro espíritu. El de Reel.
Además, por si fuera poco, Reel no ha necesitado traductores. Su nivel de castellano es tan alto que su prosa resulta extrañamente deliciosa. En ocasiones percibimos que no es su idioma natal, pero no en sentido peyorativo, sino en aras de subrayas de nuevo que estamos leyendo acerca de un lugar exótico por parte de un cicerone también exótico. Como el propio Reel señala en las primeras páginas de su libro:
Mi tema es la comparación de Estados Unidos, Nueva York concretamente, con España, Sevilla concretamente. Trato de hacerlo con objetividad, algo que al fin y al cabo no es tan difícil porque realmente no tengo preferencias. Creo que, con la perspectiva de un guiri, cualquier español llegará a ver su propia cultura con ojos nuevos. Me anima el hecho de que el dedicarme a este tema me haya ayudado a ver con más claridad mi cultura. Me gustaría que mis opiniones os agraden la mayoría de las veces, pero también espero provocaros de vez en cuando. Como decía mi padre, Bill Reel, que trabajó como columnista en Nueva York durante más de dos décadas: “Si los lectores siempre están de acuerdo contigo, no estás haciendo bien tu trabajo.