La historia de Downtown Abbey necesitaba un escenario a la altura del libreto ya que el magnífico edificio es un protagonista mas de la trama. Dicen que desde el primer día, el autor del libro ( Julian Fellowes ) tuvo en mente ambientar la historia entre los muros y en los jardines y prados de Highclere Castle. Tal vez por conocerlo íntimamente gracias a su amistad con la familia de los Condes de Carnavon, sus propietarios, o porque su arquitectura apoya visualmente la historia ambientándola con todo detalle en finales de la época victoriana y el período eduardiano cuando transcurre la serie.
Highclere Castle se ubica sobre una colina cercana a la ciudad de Newbury, a mitad de camino entre Londres y Bristol y a aproximadamente una hora y media de viaje desde la capital. Desde el edificio puede observarse toda la propiedad que incluye un bosque, prados y tierras cultivadas. La familia Carnavon vive allí desde 1679 cuando construyó su casa familiar sobre las ruinas de una antigua abadía medieval.
A finales del siglo XVIII y principios del XIX, Highclere Castle vive su gran transformación y su época dorada. Desde su transformación en una gran mansión en plena época victoriana, concentra a la aristocracia británica y sigue los mandatos de la época, siendo escenario de fiestas y encuentros políticos y culturales del mas alto nivel. Toda esta actividad lleva la firma de los quintos condes de Carnavon: Lord Jorge y Lady Almina.
El nombre de Lord Jorge Carnavon seguramente te sonará: él y su amigo Howard Carter fueron los descubridores de la tumba de Tutankamon. Lord Carnavon era un amante de la egiptología y no dudaba en gastarse el dinero familiar patrocinando excavaciones en Egipto durante décadas (así como en caballos de carrera y unos extraños vehículos motorizados llamados "automóviles" con los que asustaba a los habitantes de sus dominios corriendo por los caminos vecinales).
De sus aventuras arqueológicas se trajo cientos de piezas que, a su muerte, su viuda vendió al Museo Metropolitano de Nueva York convirtiéndose en la base de su colección sobre el Antiguo Egipto. Se guardó unas cuantas piezas que permanecieron escondidas junto con varios juegos de loza en un altillo de la mansión, hasta que sus herederos las encontraron en 1987. Actualmente esas piezas se exhiben en una sala especialmente preparada, en Highclere Castle.
Por su parte, Lady Almina también era todo un personaje. Posible hija natural del millonario Alfred Rothschild, heredó de él una fortuna que sus padres oficiales nunca llegaron a imaginar siquiera. Filántropa y amante de los arreglos florales, seguía los dictados de la moda que venían del continente con cierto retraso. Su mundo perfecto se resquebrajó con el estallido de la Primera Guerra Mundial, y no dudó en transformar Highclere Castle en un hospital para heridos británicos procedentes de los frentes continentales. Su marido era muy poco afecto a mezclarse con la plebe, pero puede que ni se enterara de todo lo que hacía su esposa durante sus largas expediciones entre las arenas junto al Nilo.
Ese ambiente tan bien retratado en la serie Downtown Abbey puede revivirse en las visitas a sus estancias. Highclere Castle se abre al público dos veces por año: durante Semana Santa y en verano, así como para algunos festivos locales. Si te interesa pasearte por los salones y encontrar las similitudes y diferencias entre la familia Crawley y los Carnavon, puedes encontrar toda la información para organizar tu visita en este ennlace.
Foto | Bas Sijkpes En Diario del Viajero | Movie location guide: para saber dónde se graban las series y las pelis