De este modo, las autoridades vaticanas explican que así se podría regular el flujo de visitantes debido a que la gente podría recorrer el lugar, apreciar desde cerca cada detalle y disfrutar de las obras de los techos y las paredes desde otra perspectiva y así permanecer durante menos tiempo dentro de la Capilla.
Claro, ya que la idea no sería cerrarla sino ofrecer otra opción a los visitantes para que puedan disfrutarla pero, a su vez, estando menos tiempo dentro. En ese sentido, la coordinadora del CNR para el Instituto de Tecnologías Aplicadas a los Bienes Culturales, Eva Pietroni explica que "la idea es lanzar un proyecto de museo virtual que permita al público profundizar en su visita y en los contenidos de la obra, con un instrumento más para acceder a este importante patrimonio".
“Simplemente buscamos ofrecer al visitante una herramienta para que se oriente mejor y entre a ver la obra familiarizado con su contenido", agrega.
En tanto, mientras el modelo 3D no se convierta en una realidad, los visitantes seguirán ingresando a la Capilla Sextina y, quienes no tengan esa suerte, podrán recorrerla virtualmente desde su hogar.
Vía | Revista Ñ En Diario del Viajero | La Capilla Sixtina: una herramienta para saber más