El Tíbet es la meseta más alta y más extensa del mundo. Sin embargo, se la considera también la "torre de agua" de nuestro planeta. O incluso el Tercer Polo de la Tierra, junto al Polo Norte y al Polo Sur. Pero ¿por qué?
Básicamente, la respuesta está en el agua congelada que contiene. En el Tíbet hay decenas de miles de glaciares que contienen la mayor reserva de hielo glacial dle mundo, fuera del Ártico y de la Antártida. Ello, a su vez, origina los ríos más caudalosos de nuestro planeta.
Diez de los ríos más grandes
Toda el agua que hay en la Tierra, el 97,5 % está salada y el otro 2 % está congelada en los casquetes polares. ¿Entonces qué porcentaje de agua podemos beber? Pues aproximadamente disponemos del 0,5 % de toda el agua del mundo. En el Tíbet se mezclan sendas partes de los dos tantos por cientos últimos, tal y como explica Lewis Dartnell en su libro Orígenes:
El agua de deshielo de estos glaciares y de la nieve derretida forma la cabecera de diez de los mayores ríos que se extienden desde allí a toda la zona sudoriental de Asia, entre ellos el río Amarillo, el Yangtsé, el Mekong, el Indo, el Brahmaputra y el Salween.Todos estos grandes ríos transportan enormes cantidades de sedimentos erosionados de las montañas para fertilizar sus llanuras de inundación y los arrozales allí establecidos.
El Gran Cañón Yarlung Tsangpo, a lo largo del río Yarlung Tsangpo, es uno de los cañones más profundos y más largos del mundo.
Para asimilar cuán gigantesco es el caudal de agua del que estamos hablando, centrémonos únicamente en el río Mekong. En él hallamos, por ejemplo, las cataratas más anchas del mundo. Con una anchura medita total de 10.783 metros, las cataratas de Khone, en el río Mekong, Laos, son unas ocho veces más anchas que las famosas cataratas del Niágara. Comprenden un conjunto de rápidos y saltos de agua (de los cuales el más alto alcanza los 21 metros) que serpentean entre un archipiélago de islotes y afloramientos rocosos.
En el Mekong también existe un famoso delta, en Vietman, que alberga una de las más diversas y pintorescas concetraciones de cultos y religiones diferentes. El delta del Mekong es un escenario fluvial repleto de habitantes pintorescos e innumerables mercados flotantes construidos sobre barcazas de madera gastada. Allí podéis contemplar las islas del Unicornio, de la Tortuga y del Fénix...
Así, la meseta tibetana sirve como la torre de agua de toda la región continental, al almacenar y distribuir el precioso recurso a lo largo de estos ríos para proporcionar agua potable, irrigación y energía hidroeléctrica a más de 2.000 millones de personas.
Tíbet tiene algunas de las montañas más altas del mundo, con varias de ellas entre las diez más altas. El Monte Everest, situado en la frontera con Nepal, es, a 8.848 metros, la montaña más alta del planeta.
Hay más de 800 asentamientos en el Tíbet. Lhasa es la capital tradicional del Tíbet y la capital de la región autónoma del Tíbet. Contiene dos sitios del patrimonio mundial: el Palacio de Potala y Norbulingka, que eran las residencias del dalái lama. Y también es, como hemos visto, la residencia de gran parte del agua que ha configurado nuestro planeta.