Para ser exactos, viajo con niñas, con mis hijas, que desde que eran bebés han subido a aviones, trenes y lo que hiciera falta para viajar. Aunque a veces también nos juntamos varias familias y los niños se multiplican… Ellas siguen siendo pequeñas y a la hora de escoger hotel, acabo fijándome en algunas cosas que antes no tenía en cuenta.
Como veréis nada de "lujos", ya que el factor económico es importante a la hora de viajar en familia y los ahorros pueden dedicarse a excursiones, visitas, comidas... durante el viaje pero no para añadir una estrella al alojamiento. Estas son las cuestiones básicas que busco en un hotel para viajar con hijos.
Que esté situado cerca de buenas conexiones con estaciones o aeropuerto. Porque moverse con un cochecito o un niño que camina despacio y las maletas no es tan fácil como hacerlo cuando iba solo con mi mochila, por lo que es importante que esos trayectos no se hagan imposibles si no dependes de un taxi.
Por la misma razón que el punto de anterior, me gusta que el hotel sea lo suficientemente céntrico como para no tener que coger transporte público cada vez que queremos salir a conocer una ciudad. Las afueras están descartadas, aunque en ocasiones por motivos económicos tampoco te puedes ceñir al epicentro de una gran ciudad. Pero no reniego de los paseos, lo que no puedo hacer es una larga distancia simplemente para empezar el día.
Que ofrezca desayuno variado, al menos que tenga fruta y lácteos diferentes (cada niño tendrá sus necesidades), aunque esto puede solventarse haciendo parada en alguna tienda y comprando provisiones. Pero mejor si lo podemos tener en el mismo hotel. Nos gusta, antes de iniciar la marcha, volver a subir a la habitación y ya después salir preparados para recorrer la ciudad o lo que se presente. Por eso, cada vez cobra más fuerza la opción del alquiler de apartamento o casa, ya que aparte de no ceñirnos a horarios podemos desayunar o cenar lo que preparemos nosotros mismos.
Que no cobren como si usáramos dos habitaciones o una cuádruple para adultos. La razón económica es de las principales dificultades para encontrar alojamiento con niños y un nuevo motivo para inclinarse por el apartamento (sobre todo si viajas con otras familias). El hecho de que cobren un suplemento por la utilización de una cuna (sobre todo) o una cama supletoria, diminuta, en la que un adulto ni siquiera podría sentarse, me parece abusivo.
Tal y como están las cosas, dentro de poco tendré que comprobar que acepten niños. Sí, que pueden entrar niños en el hotel, ya que cada vez más se extiende la opción "adults only". Que no digo yo que el "child-free" no tenga éxito y su público que no necesariamente odie a la especie humana en desarrollo, pero me lleva a preguntarme: ¿qué pasaría si hubiera un hotel que no aceptara ancianos, mujeres o personas discapacitadas...?
En fin, como veis no es lo mismo viajar sola que con bebés o niños, aunque al fin y al cabo mis requerimientos son bastante básicos (creo) y muy alejados de un hotel amigo de los niños, totalmente pensado para ellos. Y es que, al fin y al cabo, apenas lo utilizamos para desayunar y dormir... Pero estas son las cosas que busco en un hotel desde que viajo con mis hijas. ¿Cuál es tu caso?
Fotos | Phalinn Ooi y prasad.om en Flickr-CC
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