Cuando oímos hablar de un Crucero siempre pensamos en grandes lujos, cócteles con sombrillita y equipo de animación dando la lata todo el rato con las clases de zumba y de chachachá, pero está claro que no todos los cruceros tienen que ser de lujo, que los cargueros también valen para disfrutar de la Polinesia, Alaska o la costa de Noruega.
No nos hemos vuelto locos, porque hay una manera de viajar en barcos que ofrecen algo distinto, donde lo que importa es disfrutar el exterior y no únicamente el interior. Se puede conseguir algún coctel con sombrilla, y están a medio camino entre un barco de pasajeros y un carguero, pero lo que priman son las vistas y la posibilidad de hacer escala en sitios a los que no llegan los grandes barcos.
Hay una compañía, Aranui, que surca las aguas de la Polinesia Francesa en barcos que llevan carga y al mismo tiempo alojan pasajeros encantados con lo que ven: Bora Bora, los Atolones de Tuamotu y las Islas Marquesas. Es un itinerario de ensueño que lleva a costas paradisíacas. La propia empresa los llama "Cargeros Light", algo así como un tuneo del típico barco de mercancías pero que es capaz de dar un servicio bastante bueno a los que se enrolan en la aventura
El Aranui 5 es el que te lleva en esa travesía de 14 días por puertos algo menos accesibles en los que te reciben los lugareños con canciones y alegría, o que te deja en una playa paradisíaca mientras va a dejar o recoger carga cerca. Los camarotes van desde aquellos que pueden alojar hasta ocho personas, normalmente para los habitantes que lo usan como transporte de isla a isla, a camarotes de lujo con pantallas de 55 pulgadas. Eso sí, los precios una auténtica pasta.
Si en lugar de playas paradisíacas lo que buscas son tierras altas, sin playas de arenas blancas sino más bien la posibilidad de ver mucha nieve en invierno y cruzarte con ballenas lo tuyo será navegar desde Vancouver, por la Columbia Británica hasta Skagway, en Alaska. Lo que se conoce como el Pasaje Interior. Los buques utilizan este pasaje para evitar navegar por océano abierto y sufrir las inclemencias del tiempo y por ahí surcan grandes cruceros y ferries de línea. Ahí tienes tú la última palabra, o crucero con grandes espectáculos y cócteles incluidos o utilizar la Alaskan Marine Highway.
Es totalmente apetecible por lo que os voy a contar: lo podéis utilizar como si fuera el típico autobús turístico. Subir en Sitka y bajaros en Juneau y decidir quedaros un par de días viendo los alrededores (cosa que haré algún día porque allí ha decido disfrutar de la vida una compañera de estudios), o simplemente no bajarse y verlo todo desde cubierta.
Además el número de posibilidades es amplísimo, por es eso, un ferry, así que puedes ir en tu coche, coger un camarote (muy muy modesto), o decidir que tu opción es una silla en la sala de viajeros con cafetería o incluso ser un temerario y plantar una tienda de campaña en plena cubierta, bien segura, con las uniones selladas con cinta aislante o te vas a quedar pajarito del frío.
¿Que le has cogido el gusto a los Fiordos, auroras boreales, nieve y al norte absoluto? Pues Noruega está algo más cerca así que lo tuyo es informarte bien de lo que ofrece Hurtigruten. Llevan 120 años haciendo una maravillosa ruta que supone una unión con la civilización de montones de poblaciones noruegas aisladas. Para los turistas es la posibilidad de recorrer más de 1600 km en conexión directa con la madre naturaleza.
Vamos con un pequeño dato estadístico, más de 10000 norteamericanos al año deciden que este es el destino ideal de sus vacaciones y se unen a una ruta de seis días de navegación desde Bergen a Tromso y los lleva sobre el Círculo Ártico y por lo que se comenta, por mucho que no haya el lujo de un crucero convencional la comida es excelente.
Pero recordad que este tipo de travesías que hemos nombrado no son la elección adecuada si lo tuyo son:
- Los grandes teatros con espectáculos cada noche.
- Cambiarte de ropa para las cenas con el capitán.
- Los bufetes abiertos todo el día para comer hasta que no te entre una lechuga más.
- Dedicarte a las apuestas en el Casino.
- Los días de spa o gimnasio con vistas al horizonte.
- Las excursiones organizadas con pegatinas de colores en la pechera.
Imágenes | Aranui, Alaska State Ferry y Hurtigruten
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