La marca durex ha asaltado este verano las páginas de las revistas de la mayoría de aerolíneas europeas con una simpática campaña para convencernos de la necesidad de no olvidarnos los preservativos a la hora de preparar la maleta. Nos dan hasta diez divertidas razones:
- Los condones cumplen todas las normativas de seguridad y tienen la marca de calidad 'CE'... ya es algo más seguro que ese número extranjero con pinta chunga que acabas de conseguir en el bar.
- Puede que el lenguaje del amor sea universal, pero 'Querría comprar preservativos' no. Gesticular e imitar posiciones sexuales delante del farmacéutico de guardia local en una ciudad extranjera no es dar la mejor imagen posible.
- Si llevas paracetamol, repelente de insectos, after-sun y otras medicinas... ¿por qué no preservativos? también te pueden salvar la vida.
- Mezcla cuerpos bronceados y miembros del sexo opuesto ligeritos de ropa. Añade un chorro de ron local... de repente todos parecemos dioses y diosas. Asegúrate de que estás preparado para un encuentro seguro.
- Estriados, de sabores... un preservativo puede ser un juguete en sí mismo.
- Después de unos cuantos cócteles, nuestras inhibiciones bajan. Asegúrate de que tus criterios no lo hacen.
- Los preservativos apenas ocupan espacio en tu equipaje... no como los pares de zapatos extra y toda esa ropa que llevas 'por si acaso'.
- La cara quemada, un sombrero ridículo o las fotos del Facebook bailando en el bar pueden avergonzarte, pero la clamidia es mucho peor. Es la más común enfermedad de transmisión sexual y a veces no presenta síntomas, pero puede llegar a producir infertilidad si no se trata.
- Los condones son el único medio que protege a la vez de las enfermedades de transmisión sexual y de los embarazos no deseados.
- Si a tu pareja no le importa hacerlo sin preservativo, probablemente seas el último de una larga lista de relaciones sin protección. Con un preservativo, te aseguras de no acostarte con todas sus anteriores parejas.
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