La provincia de Yunnan es conocida por ser una de las más diversas en cuanto a paisajes, lenguas y grupos étnicos. La história de esta provincia se entiende sólo como un punto de encuentro entre culturas, lo que le ha dado una personalidad única. Y único también es uno de los pueblos que los viajeros pueden encontrar en ella: Dali.
A tan sólo 3 horas en autobús desde Kunming, el pequeño pueblo de Dali es un remanso de paz a orillas del inmenso (en tamaño y belleza) lago Er Hai. Al otro lado, las montañas de Changshan, algunas de hasta 4.000 metros de altura, hacen del entorno algo surrealista.
Pero por si el entorno natural del pueblo no fuera suficiente, el propio pueblo antiguo de Dali es pequeño y bonito, restaurado y repleto de bares, restaurantes y animación a todas horas. Y es que el pueblo se está popularizando mucho entre los turistas chinos, cosa que hace que a menudo se llene de autobuses de viajeros nacionales.
No obstante, Dali sigue conservando algo de esa esencia que lo situó en el famoso Hippie Trail de los viajeros europeos que se aventuraban hacia Asia en los años 70 y 80. Se trata de una parada más que recomendada para todos aquellos que viajéis al sur de China.
Imagen | Jo Schmaltz En Diario del Viajero | Viaje a China: recomendaciones de la casa En Diario del Viajero | Paisajes impactantes: el Bosque de Piedra de Shilin