Esta playa es Praia do Cassino y se encuentra en el estado de Rio Grande do Sul, en Brasil: 40 kilómetros de longitud y una anchura media de 2 kilómetros, desde el muelle oeste de la ciudad de Rio Grande hasta Chuy, justo en la frontera con Uruguay. Incluso consta así en el Libro Guinness de los Récords.
Si aquí el juego no se hubiera prohibido allá por el año 1946, Praia do Cassino también destacaría por otra razón: por la cantidad de casinos y salas de juegos. Y es que el nombre de la playa procede precisamente por el hecho de que, desde principios del siglo XX, proliferaron los casinos, las salas de juegos y los hoteles que albergaban a los magnates que venían hasta aquí para quemar su dinero. Ahora todo ello no es más que un recuerdo, como el barco Altair.
Vía | Canal Viajes
Fotos | O Globo