Claro, ya que en ciudades importantes de ambos países se han puesto en marcha preparativos de grandes dimensiones que atraen a miles de visitantes y de los que habla el mundo.
Brasil
No pueden ostentar el título del árbol de Navidad más alto del mundo, pero sí el del árbol de Navidad flotante más alto. Esto es así ya que, como hace ya catorce año, la Laguna Rodrigo de Fleitas de Río de Janeiro luce orgullosa este verdadero espectáculo.
De 85 metros de alto, lo que equivale a un edificio de 28 pisos, 35 metros de diámetro, 240 toneladas de peso, alrededor de 3 millones de pequeñas lámparas, 1600 estroboscopios que dan un aspecto destellante y 11 patrones secuenciales, este árbol es, sin dudas, un atractivo más de los que pueden apreciarse en la hermosa ciudad carioca.
Construido sobre una plataforma flotante, los visitantes podrán disfrutarlo hasta el próximo 6 de enero cuando comience a desarmarse y deba esperarse un año más para verlo lucir radiante.
Así, como cada año, el espectáculo cuenta con un lema y, en esta oportunidad, la frase elegida fue: Uniendo nuestros mejores deseos.
Cabe destacar, además, que se trata de un árbol ecológico, ya que con el fin de reducir las emisiones de gas carbónico, se utiliza electricidad producida por generadores alimentados a biodiesel.
México
Y es la capital mexicana la que cuenta con el orgullo de tener el título de la ciudad con el árbol de Navidad más alto del mundo. Ya consagrado como récord Guinness, éste se alza en el Paseo de la Reforma, mide 110 metros con 35 centímetros, 35 metros de diámetro y pesa 330 toneladas.
Así, iluminado con 72 kilómetros de microlámparas, 80 mil metros de cables eléctricos y 600 luces estroboscópicas, el árbol forma parte del programa de eventos La magia de la Navidad que se desarrollan en la capital.
De este modo, la ciudad también luce alumbrado con motivos navideños ubicado en la fachada de los edificios del Gobierno. Un trabajo en el que se utilizaron 80 mil bombillas.
En tanto, y como en años anteriores, el Zócalo luce nuevamente su enorme pista de hielo. En esta oportunidad, de 61 metros de largo por 31 de ancho.
Además, este año completan las actividades una zona de guerra de nieve y un área de motos de nieves con rampas.
De acceso libre y gratuito, los horarios son de 10 a 21 y cada persona podrá permanecer en la pista por un lapso de tiempo de 45 minutos y, cabe destacar, ello incluye el préstamo de los patines.
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