Hace más de 1.200 años la cultura quintu enterraba a sus muertos en profundos hoyos en la tierra. Ahora podemos apreciarlos gracias al Museo de Sitio La Florida, en plena ciudad de Quito donde se encuentra el yacimiento.
Las tumbas tienen forma de profundos fosos cavados en la tierra. En ellos se acomodaban en hasta 3 niveles, los cuerpos de los difuntos junto con vasijas de barro co nchica, joyas, instrumentos musicales y tejidos. Este centro ritual fue descubierto en la década de los años 30 del siglo pasado y recién ahora se consigue ponerlo en condiciones para que se puedan apreciar in situ.
Entre las pertenencias encontradas se pueden ver ponchos forrados con colgantes de concha spondylus y concha madre perla y joyas elaboradas en oro, plata y cobre. Estas piezas se exponen en el museo junto con figuras humanas elaboradas a partir de las evidencias óseas y la posterior reconstrucción de los cráneos y cuerpos de los antiguos pobladores quiteños. Fueron colocadas en una de las tumbas, de la misma manera como fueron enterrados los cuerpos entre los años 220 dC y 640 dC.
Las tumbas tienen forma de botella o chimenea invertida, cuentan con una plataforma y una cámara interna en las que fueron enterrados los quitus. Hoy una pequeña cámara permite tomar imágenes del interior que se ven en pantallas sobre la superficie. Tenemos que saber que estas tumbas llegan hasta los 17 metros de profundidad.
Este centro ceremonial de la civilización quitu, se une a la red de sitios arqueológicos de la ciudad de Quito conformada también por los sitios de Tulipe y Rumipamba.
El Museo de Sitio La Florida se ubica en la calle Antonio Costas y Román, Sector La Florida, Quito. Abre gratuitamente de miércoles a domingo de 8 a 16.30 horas.
Foto | Instituto Metropolitano de Patrimonio Cultural de Quito
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