Así, y tras las controversias generadas en torno a su construcción, finalmente este edificio podrá comenzar a edificarse. Es que esta obra del arquitecto argentino César Pelli contará con 67 pisos y 362 metros de altura, algunos metros que el Empire State.
Pero, sin dudas, el conflicto principal tiene que ver con el protagonismo en el paisaje de la ciudad. De este modo, el propietario del histórico rascacielo fue el primero en oponerse a la construcción del nuevo edificio por considerarlo “una monstruosidad” que destruirá el famoso skyline de Nueva York y que, en consecuencia, podría llegar a afectar a la industria turística de la ciudad.
Un problema que tiene que ver con la competencia y la posibilidad de que la nueva construcción opaque a su emblemático rascacielo, dado que el nuevo edificio se encontrará a pocas calles y podría llegar a tapar parte de las vistas del Empire State.
Como sea, el proyecto está aprobado aunque aún no se tienen datos de cuándo comenzarán las obras. ¿Un nuevo atractivo o una construcción que cambiará la fisonomía de la Gran Manzana? Todo depende del cristal con el que se lo mire…
Vía | El Mundo En Diario del viajero | El Empire State Building en números En Diario del Viajero | San Valentín: "Tú y yo" en el Empire State