El pasado mes de abril George Clooney y su padre el periodista Nick Clooney, junto con otro familiar y un fotógrafo, viajaron a Sudán en un pequeño avión y visitaron un poblado a las afueras de la frontera de Darfur.
Allí grabaron entrevistas con refugiados del conflicto que asola Sudán desde hace cuatro años, donde ya han muerto más de 200.000 personas, y con supervivientes de los dos lados de la frontera.
El que ellos mismo han calificado como el primer genocidio del siglo XXI ha provocado ya dos millones y medio de refugiados además de los centenares de miles de víctimas.
Con esta película pretenden llamar la atención internacional sobre el conflicto. Se titula A journey to Darfur y sus imágenes, inéditas hasta ahora, serán con toda seguridad un grito desgarrador y un puñetazo en las conciencias de occidente.
¿Y por qué comentamos esto en un blog que habla sobre viajes? Pues porque es un ejemplo de que en ocasiones los viajes no son sólo de placer, sino que tienen una finalidad "responsable", dar a conocer la realidad de un país olvidado.