En la remota zona de Kamchatka, en el extremo oriental ruso, se descubrió en 1941 un valle glaciar único en el mundo por el número y características de sus geisers.
Esta maravilla natural estuvo accesible hasta hace muy poco con estrictos cuidados para mantener su inestable equilibrio hidrológico. En el año 1981, fue afectado por un tifón que elevó los niveles de agua subterranea y "taponó" los geisers que tardaron 3 años en recuperar su actividad. Era uno de los destinos más buscados por los viajeros amantes de la geología.
Decimos "era" porque leemos que el pasado domingo, un deslizamiento de tierra de casi un kilómetros de largo y millones de metros cúbicos de piedra y barro sepultaron más de 90 geisers, casi las tres cuartas partes de los que había en la Reserva Natural de Kronotski.
Los expertos dicen que esta catástrofe, que produjo un cierre del valle, puede convertirle en un lago termal. Los técnicos del sector turístiocos de la zona se aferran a esta "esperanza" para no ver perdida su fuente de ingresos principal.
La fuerza de la Naturaleza se revela. Por lo visto, el espectáculo único del Valle de los Geisers ha desaparecido para siempre.
Vía | The Guardian Sitio oficial | Valle de los Geisers